Lleva tiempo dando la lata. Es más, fue el primero en cortar cabezas. Eso sí, lo hizo a su manera. Nada de despidos. Él apuesta mejor por traslados al fin del mundo para que el trabajador ni siquiera cobre indemnización. Da igual si llevan con él más de una década, casi dos, o si incluso están antes que él en una casa a la que le tiemblan los cimientos, como es el caso de algunas personas a las que conozco. A su favor tiene que nadie se atreve a hablar. El dinero calla bocas unas veces y las presiones dan miedo en la gran mayoría de los casos. La familia está en juego muchas veces, y la hipoteca aprieta la soga que muchos tienen al cuello.
Mientras tanto, las Administraciones que tanto dinero le han dado, le dan y darán miran para otro lado. Pasan página, aunque su periódico ni se lea. En realidad, no sé qué les hace tener tanto miedo, pues el EGM habla por sí solo y una pataleta suya ni siquiera se oiría… si es eso lo que temen.
Pero muy al contrario, prefieren ser cómplices de una política laboral que se repite en otros medios, con otro traje y otros nombres. Eso también le sirve de justificación.
La pena es que al final todo acabará como siempre en estos casos: él y su núcleo duro seguirán nadando en la abundancia, quienes esto permiten opositarán para conseguir un buen puesto, y el resto tendrá que sobrevivir como pueda, aceptando las migajas que sobren e impongan, mendigando otro empleo o incrementando las listas del paro. ¿Qué más da otros cuantos parados más en una ciudad con más de 26.000, verdad? Eso es lo que se avecina, así de claro. No hay más, porque él sigue ERE que ERE y a estas alturas da exactamente lo mismo si es encubierto o no. ¡Maldita sea la guasa de este asunto!
Tiene musha guasa. Y nosotros, pobres ciudadano simpasibles. ERE por un lado, ERE por otro lado, y nosotros ni siquiera protestamos contra el ERE que ERE.
ResponderEliminarAh no. Pero si estamos protestando. Aprovechemos nuestros blogs para pedir un cambio, donde miremos más por los quemás lo necesitan, porque mientras preparamos cañas para enseñar a pescar en otros ríos habrá que tener algo de comer.
Ninguno de los que me gobiernan o han gobernado me convencen hoy. ¿Porqué no emprezar desde Jerez con una plataforma de ciudadanos descontentos?
Descontentos? sólo descontentos? la situación de pobreza y sumisión que se vive en Jerez es avasalladora. Se tiene mentalidad esclavista.
ResponderEliminarEs lo que hay, y por eso nadie dice nada. No existe nadie con la dignidad suficiente que levante la voz y denuncie la situación. Entre subvenciones de todo tipo, y puestesillos, y sobre todo pactos cinicos. Los llamados de izquierda, ya tiene sus empleos respectivos, los llamados derecha sus planes y proyectos subvencionados, luego estan los llamados socilistos....esos son muy listos.